La inocencia y el cinismo

Hace un tiempo estuvimos hablando de la inocencia en el trabajo para la narrativa de un proyecto, a mí hacer estas cosas me encantan porque creo que pensar conceptos se me da bien, quizás es lo que más se parece a lo que he estudiado de las cosas que hago en mi vida laboral. Hablamos de mogollón de cosas en torno a la inocencia: el factor género, la línea que hay entre no enterarte de las cosas o salir bien parado justo por ello… y un día más desde que aprendí lo que era el autoconcepto, no pude evitar llevármelo a mi terreno.

Creo que la música independiente utiliza muchísimo la inocencia y lo naive, en un espectro de ironía bastante amplio. Por una parte conlleva una estética que es muy chula y justo este rango de ironía hace que sea divertido jugar con ella, pero el otro día pensé si acaso esta estética también sirve como escudo de inseguridad ya que está muy cerca de la humildad, y todos sabemos que ser muy humilde hace que se rebaje mucho más la altura con la que te puedes pegar la hostia si algo sale mal.

Esto lo digo en gran parte por mí, que al final mis recursos estéticos son muy romanticones y cuquis aunque con un poco de pelo en el pecho, y llevo un tiempo reflexionando sobre esta estética porque, aunque mucha gente si la ve acorde, a mi me parecía que tenía poco que ver conmigo.

Siempre he sentido que en el fondo soy un cínico, de hecho he escrito muchas canciones desde una perspectiva muy conscientemente oscura, en plan “ el mundo es una mierda pero es lo que hay”, un poco a modo antagonista, aunque realmente este antagonismo no es tan antagónico porque el cinismo es también una forma, más o menos legítima, de cubrirse las inseguridades, así que a fin de cuenta este giro de personalidad es un poco como el de Jojo Siwa vestida de dragón negro. Esta última referencia no la tenía pensada y empatizar con esta chica me da más pistas sobre mi.

Creo que la relación entre uno y su proyecto personal a veces se me hace bola, porque las líneas son difusas, yo al principio elegí que mi nombre artístico no fuera el mío propio para tener un poco de estabilidad y libertad con mi arte, bueno por eso y porque Nicolás Bordas es una especie de tiburón francés que hace think tanks. Creo que los personajes artísticos realmente no son tan personajes, si lo piensas dos veces, las eras de Taylor Swift son, a nivel artista, solo momentos de la misma persona, una de las caras de la personalidad como fractal (toma máster de estudios culturales). Si lo piensas una tercera vez, todas y cada una de las travestis que salen en RuPaul dicen que el drag es una expresión de ellas mismas, y esos pelucones si que son cambios en tu propia percepción.

A mi a veces Nudovaca me cansa, supongo que tiene que ver con muchas de mis inseguridades. Es un buen momento para contaros que estoy haciendo un trabajo conjunto con mi psicóloga y mi profesora de canto para gestionarlas porque creo que me freno mucho a mi mismo, como tenga miedo al éxito me voy a rallar de verdad, pero bueno ya contaré. También creo que tiene mucho que ver con todo este proceso de cambio personal que ya he mencionado otras veces, de hecho, ahora que lo pienso, seguramente el cambio vital sea una de las razones principales por las que un artista cambia su forma de expresarse, no?

Si no es verdad que la inocencia y el cinismo son dos personalidades opuestas es porque pueden convivir de forma armoniosa, así creo que la dulzura y tener los pies en la tierra son dos cosas que pueden coexistir en alguien, de hecho pienso en Chica Sobresalto siendo muy dulce, hablando de cosas muy serias y cagándose en todo el mundo en los directos y supongo que ahí es donde está el punto medio y la virtud . Creo que la conclusión final es que aferrarte solo a una personalidad marcada y permanente, no ha servido a nadie nunca, y menos a mí, y que en verdad puedo ser todas las partes contradictorias y complementarias que me den la gana.

Tengo muchas ganas de que esta idea se convierta en canciones.

Besos de vaca para todes